Por fin llegamos a la fatídica fecha que todos esperabamos: EL JUICIO DE BEGO.
Allí estábamos todos los que podíamos ir a apoyarla. Ella estaba como en una ola, que la mecía de un lado a otro. Intentaba darle las gracias a todo el mundo, a la vez que estaba pendiente de quién aparecía del otro bando. Escuchaba los comentarios, gratuitos de todos los "expertos" que diagnosticábamos cómo iban a desarrollarse los acontecimientos. Veía cómo delante de sus narices, los abogados empezaban la partida de ajedrez, en la que ella era la ficha más importante .
Y en toda esa perturbación.... Allí estaba ella: firme, sin nervios, aguantando las puñaladas traperas, de gente por las que ha hecho más, de lo que nunca hará nadie por ellos.
Y cuando su abogado la llama para firmar un acuerdo. Todavía tiene dos ovarios, para presentar un papel (que define mucho el corazón tan grande que tiene), en el que intenta ayudar a Mª Angeles. Cuando Mª Angeles no necesita ayuda alguna; pero así es ella...
Bueno desde aquí, te quiero felicitar por el resultado de ese juicio, de parte de todos los jartibles. Que cómo viste el otro día, te quieren un montón.
Que conste gafita, no vayas a llorar cuando leas esto que te conozco....
Besitos jartibles
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Ay juanichi, no se puede ser más generoso! Encima de todo lo que nos ayudaste, este comentario...
ResponderEliminarEs imposible expresaros tanto agradecimiento y lo enormemente arropada que me sentí.
Si no tenía nervios es porque allí estábais todos, mi familia, mis amigos y mis compis...Y también otros que me acompañaron en espíritu con sus SMS o sus llamadas de apoyo.
Quedó claro que los que actuamos de buena fé jamás estaemos solos.
He aprendido mucho estos últimos meses y creo que me he hecho mayor de pronto. He sido una privilegiada: en 38 años no me ha respirado cerca la maldad, el egoismo y el desagradecimiento ajeno.
Ahora sé lo que es eso pero no van a lograr que sea una resentida ni van a frustrar mi vocación de maestra ni mi amor por hacer las cosas con ilusión, creatividad y honestidad.
Ellos jamás sabrán la felicidad que te proporciona un trabajo tan maravilloso como el mío, que más que eso es una forma de vivir y sentir.
Y que además se puede desarrollar en otros lares y con otras gentes...quizás más agradecidas.
Gracias infinitas.
Os quiero jartibles.
PD: soy la gafa chica:Es que no me deja publicar el comentario y esta es la única forma que tengo de hacerlo.
¡¡¡Ole Juan y ole la gafita.!!!
ResponderEliminarQuien siembra vientos recoge tempestades y quien siembra amistad disfruta de una gente estupenda como sois vosotros. Ese día no hubo nadie en el mundo que pudiera estar más apoyada (perdón por la palabra :)) ), querida y arropada. Cuando se tienen amigos de esa categoría, ¿qué se puede decir?
Daros las gracias a cada uno de vosotros, al que estuvo allí codo con codo, como al que tenía a Bego en el pensamiento. Cosas así no se olvidan porque llegan a lo más hondo.
Ahora mismo me viene a la mente un conocidísimo poema del recién fallecido M. Benedetti. Va por cada uno de vosotros:
Hagamos un trato
Compañera, usted sabe que puede contar conmigo, no hasta dos ni hasta diez sino contar conmigo. Si algunas veces advierte que la miro a los ojos, y una veta de amor reconoce en los míos, no alerte sus fusiles ni piense que deliro; a pesar de la veta, o tal vez porque existe, usted puede contar conmigo. Si otras veces me encuentra huraño sin motivo, no piense que es flojera igual puede contar conmigo. Pero hagamos un trato: yo quisiera contar con usted, es tan lindo saber que usted existe, uno se siente vivo; y cuando digo esto quiero decir contar aunque sea hasta dos, aunque sea hasta cinco. No ya para que acuda presurosa en mi auxilio, sino para saber a ciencia cierta que usted sabe que puede contar conmigo.
Ay joé! qué bonito! me sumo a las felicitaciones y me alegro de que la pesadilla haya terminado. Creo que todos hemos aprendido de esta experiencia, algunas cosas buenas y otras malas y que la lección más importante es saber que estamos juntos, arropándonos unos a los otros cuando lo necesitamos. ¿QUÉ MÁS PODEMOS PEDIR?
ResponderEliminarBesitos para todos, especialmente para la pequeña.
Gafita, no te parece maravilloso todo esto? Nunca he creido mucho en eso de que "no hay mal que por bien no venga" pero creo que has ganado en todos los aspectos. La justicia te ha dado la razón, aunque no necesitaramos papeles para saberlo. Has sentido el apoyo de todos los que te queremos y creemos en ti como persona y educadora. Profesionalmente también vas a ganar. Vuestro nuevo proyecto estará impregnado de vuestra filosofía integradora, fuera de todos esos complejos y prejuicios que tienen algunos padres y familiares de las personas con discapacidad y que tanto entorpecen la labor de los educadores.
ResponderEliminarLo único negativo, el sufrimiento ocasionado a ti, tu familia y amigos. Pero eso forma parte de la vida y todos con más o menos tiempo nos recuperamos, y tu lo harás en el momento que estés otra vez en activo.
Juan, no se si la gafita ha llorado con todos estos comentarios pero es dificil no emocionarse, y además es sanísimo echar de vez en cuando unas lagrimitas. Yo me he quedado la mar de bien.
A los demás que habeis estado o todavía estais allí, rodeados de los malos, ánimo y vereis como dentro de nada estais fuera de esa concentración de mala idea. Mientras tanto disfrutad de vuestros chavales.
besitos para TODOS
Hola guapa: Yo también te quiero dejar mi mensajito, aunque ya hablamos por teléfono. Mucho ánimo y verás como con tu personalidad y con tu trabajo tiras pa'lante estupendamente. Como dice Emilio, el que siembra recoge, pero lo que pasa es que tú por donde pasas vas sembrando cariño y claro, no puedes recoger otra cosa. Un besote muy fuerte y sigue así que vales un potosí.
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